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Recomendaciones para el cultivo de la alfalfa

Conseguir incrementar la producción del cultivo de ALFALFA, tiene que ser un objetivo primordial dentro de nuestra explotación, tal y como nos lo planteamos con el resto de cultivos para lo cual conviene tener en cuenta las siguientes recomendaciones:

  • ELECCION DE LA PARCELA ADECUADA.

Sembraremos alfalfa en tierras que sean productivas en las que invertiremos, agua, abonos, fitosanitarios…, consiguiendo así aumentar nuestras producciones.

  • SIEMBRA:

Periodo de Siembra: Preferiblemente en otoño (desde mediados de agosto hasta octubre), para que el primer año de vida del cultivo  sea mucho más rentable al comenzar los cortes como el resto de las alfalfas de años anteriores.

Labores de Siembra: Preparar la tierra siempre como esté el riego (pívot o cobertura) y dejar el terreno muy bien para evitar encharcamientos y ayudar a una mejor nascencia del cultivo.

  • ABONADO:

Forrajes y Proteínas aconseja un abonado de implantación, con un  COMPLEJO. (El cultivo de alfalfa, al igual que el resto de los cultivos, necesita un aporte de N-P-K.) de acorde a las características del terreno y la extracción del cultivo.

Un abonado de mantenimiento anual, que se aportará durante el mes de febrero- marzo con un  COMPLEJO N-P-K.

En las superficies de riego, se podrá completar el abonado añadiendo después del segundo y tercer corte un aporte de Nitrógeno más Boro.

  • TRATAMIENTOS FITOSANITARIOS:

Plagas: Pulgón, Cuca, Apión. Estas plagas suelen aparecer  al comienzo de la primavera,  es muy importante tratar a tiempo, incluso prevenirlos (persistencia del producto) para obtener un buen corte, pues los daños merman notablemente los kg por corte. Aconsejamos un tratamiento al comienzo de la primavera, una vez que la temperatura cambia, lo que nos permitirá un primer corte sano y con mayor Kg/ha.

Malas hierbas: Es importante para la implantación del cultivo, así como para años sucesivos que las parcelas estén limpias, para eliminar la competencia que las malas hierbas ejercen sobre el cultivo de alfalfa y obtener mayor rendimiento.

Cuscuta: Aconsejamos tratar, nada más ver los primeros hilos para evitar su propagación en toda la parcela.

  • RIEGOS:

El riego, junto con la temperatura,  son factores limitantes de la producción en el cultivo de alfalfa. No existe “una dosis” de agua, sino que debemos conocer; tipo de terreno (arenoso, arcilla…). Características del suelo (ladera, llano,…), Capacidad de campo.

Es muy importante que el suelo, siempre tenga humedad, no debemos dejar secar el suelo, (el suelo retiene el agua con más fuerza a medida que está más seco) y repercute en el rendimiento del cultivo. (Cuando la transpiración es mayor que la absorción las plantas se marchitan, reducen la fotosíntesis perdiendo producción)

Antes de la siega conviene que se le dé un riego ligero para facilitar su rebrote.

  • FRECUENCIA DE CORTES:

Los cortes los realizaremos, cuando nos aparezcan las primeras flores, que suele ser a los 30 días aproximadamente, si la climatología nos acompaña. Pudiendo obtener hasta 6 cortes por campaña.